viernes

Divagues de la historia

Siempre me describo y me describen como tímida. Incluso las personas que tiene 2 días de conocerme.
“es que eres muy tímida” “es que es muy tímida” “es que soy muy tímida”
Tímida y otras cosas que me impiden relacionarme con la gente o confiar muy rápido. No me gusta. Históricamente, no soy una persona que cuente su vida a los demás o que le encante saber la historia completa de los demás.
Tal vez en parte porque he aprendido que no siempre está bien indagar. Lo aprendí bien cuando pregunté ¿Cómo se llama tu mamá? Y me enteré que la mamá de mi interlocutor abandonó a su familia cuando él tenía no más de 4 años y desde entonces su papá llevaba “una mamá diferente cada semana” . Sentí horrible. Ya se que ese tipo de cosas pasan pero… prefiero evitarlas.
Desde entonces, mis relaciones sociales se volvieron aún más superficiales. Hasta el día de hoy, no se por qué mi mejor amiga se lleva tan mal con la pareja de su mamá, o qué pasó con su papá. No se por qué la relación de quien fue mi hermana en mi infancia se rompió con su mamá. No se qué sintió mi papá cuando murió mi abuelo y él se encerró más de 20 minutos en una recámara y no nos dijo nada.
Fue entonces, supongo, cuando descubrí que era todo más sencillo por internet. No había necesidad de que supieran mi nombre o vieran mi cara. Bastaba un algo que yo me niego a aceptar como apodo, alias, pseudónimo o lo que sea… y mi voz. Era mejor. Contestaba saludos a quien yo quería y a quien no, bastaba hacer clic en el botón rojo superior derecho.
Una noche, una madrugada, inició conversación alguien con un mail gracioso, pero no estúpido como otros que había visto. Me pidió canciones bobas, saludos y me hacía reír mucho. Esa noche, yo quería dormir pero la plática me impedía cerrar la conversación – cosa que yo hacía con la mano en la cintura, sin que me importara la persona al otro lado de la pantalla.
Entonces supuse que era mejor usar mi coreo personal, era un reconocimiento muy burdo de un VIP.
No conocí a esta persona hasta un poco después. Lo ví, lo reconocí y yo sentí como si lo conociera lo suficiente como para no morir de pena por verlo, como me pasaba con el 99% de las personas que yo conocía en la vida real.
No se si sea correcto llamar a eso “amistad”, porque dicha persona se conectaba un día y luego meses de ausencia, y luego se conectaba y así… y cada vez, yo podía saludarlo con naturalidad, escribir un “FEO” seguido de muchos puntos de admiración porque, por alguna extraña razón, me daba mucho gusto saludarlo, saber de él.
Era sencillo contestar a preguntas, era sencillo reírse de los chistes, dar clic a los links que me enviaba… yo disfrutaba mucho.
Disfruté mucho ir al cine y volver caminando a mi casa. Disfruté el par de partidos que “compartí” con él. Me gustaba encontrarlo de repente y sí, seamos honestos, se me quebró un poco mi corazón cuando grité su nombre a mitad del estadio y él hizo cara de hueva absoluta al ver que era yo quien le hablaba.
Me gustaba sentir una cercanía así con alguien que era un completo desconocido, pero yo me sentía bien, cómoda, a gusto.
Un día de agosto, matando tiempo en una jardinera en las islas, yo escuchaba no se qué aventura suya y de repente en mi mente apareció una pregunta “cómo besará”?? Evidentemente me reprendí y me concentré en la plática. Era mi amigo y yo tenía novio. Aún no se cuál fue la línea de pensamiento que me llevó a formularme la pregunta.
Una semana después, lo descubrí en una sala de cine, después de reírme mucho por un chiste en uno de los momentos cumbre de la película.
Esos días, esas últimas semanas, nos habíamos hablado, visto, mensajeado, messengereado, mandado indirectasdirectas, recomendado canciones, dicho cosas… supongo que dejó de cierto modo, de ser mi amigo.
Era muy fácil querer a ese hombre tan alto, que acababa de lograr algo importantísimo: ser aceptado en una universidad.
Era muy fácil decirle cosas, hacer cosas, jugar, pensar, ñoñear, tirarse al pasto, abrazarse… era más fácil porque no había ninguna barrera ni nada que a mi me impidiera acercarme.  Contestar el tipo de preguntas que sólo él hacía y que yo sólo a él hubiera podido contestarle sin morir de pena.
La forma en que las palabras, las preguntas y las respuestas brotan de él, con tanta facilidad, no se si pueda decir que es contagioso, pero invitan a contestar, a seguir el diálogo… Sus acciones, tan espontáneas…
Supongo que algo de eso tuvo que ver para que me decidiera un sábado a faltar a mi curso de CONAMAT, con todo y que yo sabía que si quería entrar a la UNAM, no podía faltar. Al final de todo, no me quedaba más que encomendarme a los santos.
Toda esa situación, de no pensar mucho las cosas, de pensar que “si no es ahora, cuándo y si no soy yo, quién”….Es una de las millones de razones por las que amo mi relación sentimental.
He hecho muchas cosas, no se cuántas sean malas, ni en qué grado… pero supongo que si no hubieran pasado, no estaríamos aquí. No de esta manera.

Etiquetas: , ,

sábado

De nuevo don mario

Cuando era chica, pasaba buenos ratos con mi papá:
Me enseñaba a usar el desarmador, a andar en bici, me explicaba cómo funcionaba el futbol, me explicaba cosas del motor del coche...eramos muy felices.
yo era todo un niño. Amaba las cosas de "tecnología" (lo que en ese tiempo era tecnología), me enseñó a usar un celular, por ejemplo. y él tenía otro hijo.

Hace tiempo en un twitt escribí que "cuando me maquillo, siento que le estoy fallando a mi papá" Y es verdad.
Nuestra relación se complicó cuando, (no podía ser de otra manera) dejó de ser tan simple como las cosas que hacíamos cuando era niña.(niño, pues)
Ok, explicación:
Cuando la cosa dejó de ser un simple, "aquí usas el desarmador plano", "tienes que agarrar el taladro así" y cosas de ese estilo, todo se complicó...
además de los infartos, obvio afectó...como que no tuve papá y se volvió el ser extraño para mí que es ahora...

Como cuando Wilson dijo que había caido una cortina de acero.... allá en 1945...

El punto es...que tenemos una buena relación en cuanto a cosas banales...pero nunca hemos "hablado" de nosotros y nuestros sentimientos y esas boberías. Porque somos muy machitos para eso (ahora entienden lo del niño que era yo?)
Por ejemplo: mi papá nunca me dice cuando algo de mí le molesta... me entero de ello o porque él se lo dice a mi mamá y ella a mí; o porque lo hago enojar, se pone fúrico y me lo dice a los gritos y yo lloro como bebé.


A lo que voy con todo esto es que últimamente he tenido más y más y más choques con mi papá. Su actitud, mi actitud, su orgullo, mi orgullo...
Nunca hemos tenido una relación suficientemente buena como para evitar conflictos.
Tengo 19 años, no salgo a fiestas, no llego después de las 7 de la noche a mi casa, no llego nunca borracha, no me quedo a dormir en otras casas... y me duele el estómago cada vez que tengo que pedirle permiso de ir al cine, de ir a un museo...

Creo que los dos sabemos que tenemos un problema... pero nunca vamos a aceptarlo y por ende, nunca vamos a resolverlo.

Esto me da más miedo cuando veo a mi abuelo, que depende de sus hijas, al papá de un tío, en la misma situación.

Cada año que pasa me cuesta más trabajo manejarme en la situación y no quiero salir huyendo de la casa como hicieron mis hermanos, casandome a los 20 años para irme o aprovechando una enfermedad para desentenderme. No quiero, pero a veces pienso que así es como voy a terminar.



En otra lectura de todo esto, me doy cuenta que mi miedo a fracasar, es lo que me está orillando a ello. En TODOS los sentidos. Y eso me pone peor.

Etiquetas: , , , , ,

domingo

Death, again

no se cuántas entradas le he dedicado a la muerte en este blog, muchas, o muy pocas, supongo. Mucho menos de las horas que he pensado en ese "paso" durante los 18 años de mi existencia.
Y es que cada vez que pienso en eso, descubro algo nuevo, o lo percibo de una manera distinta.

Durante 6 días (desde el domingo pasado hasta ayer sábado) tuve un patito, sí, un ave (quién me lo iba a decir!), era bebé de unas 2 semanas de nacido. Era feliz y yo juraba y me alegraba porque le iba a dar yo la vida que no tendrían sus otros 4 hermanitos que estaban con él en la jaula de donde lo sacaron para darmelo en una bolsita de papel.
Era pequeño y supe que tenía que intentar cubrir yo, el papel de su madre, aunque consciente estaba, que no lo lograría jamás, no tengo plumaje, no grazno, no sabía alimentarlo...
El pato me seguía a todos lados, como llamándome... era un cuacuacua en el mismo tono siempre que me buscaba, volteaba su cabeza para mirarme de lado y corría en mi dirección. Me buscaba para que lo alimentara y me buscaba para que lo secara después de que se bañaba en su agua.
En las noches rascaba en la caja donde dormía para que lo sacara y lo dejara dormir conmigo, cosa que hice sólo unas 3 veces y por ratitos, más por miedo a aplastarlo que por miedo a que ensuciara mi cama, me pegara bichos o cualquier desgracia que todos juraban que me iba a hacer el pobre pato bebé.
Solía buscar refugio abajo de mi brazo o en mi cuello, escarbaba entre mis piernas para acomodarse y dormir... se arruyaba como ronroneando.
Se lastimó la pata, le dí medicina que -supongo- su corazón (diminuto y con un ritmo muy acelerado) no resistió. Muríó dos horas después de la última vez que lo apapaché y lo dejé dormir conmigo.
La siguiente vez que lo ví, estaba echado (tirado) a mitad de su caja,  ojos a medio cerrar pero fijos... en mí.
Sí, realmente quise morir.
Con miedo, mucho miedo, lo toqué. Miedo porque sabía que iba a estar frío. Frío, después de que durante los 6 días que lo tuve, lo primero que se percibía de él, era el calorcito de bebé que emanaba. Duro, como madera, aunque hacía un par de horas era más que un suave peluche.
Lloré, sí, mucho. Porque sabía -sé- muy bien que sufrió antes de morir, porque era un bebé, era yo su mamá. Era él mi responsabilidad.
Lloré porque comprendí, de nuevo, 5 años después, que no importa cuánto cariño o amor le tengas a algo/alguien, siempre mueren. Sí, ya se me habiá olvidado ese domingo, esa caja...esa vez.
Entendí ahora, y de una vez por todas, que por más que me gusten, por mucho que los quiera, los animales no son para mí. Por mucho también, que "duela" porque sí, sí me duele.
Se quedó mi pato en su caja, en medio, con sus ojos que me veían llorosos cada vez que me asomaba.
Juro, lo juro, que lo escuché más de una vez. Juro que cuando me metí en las cobijas sentí algo pequeño moverse al lado de mí.  Pero no, él estaba en la caja y su corazón ya no latía.
Qué iba a hacer con él?.
Enterrarlo? Con más de 100 gatos por aquí, estaba segura que al día siguiente habría pedacitos de mi bebé pato por todo el jardincito. Además es ilegal aquí.
Cremarlo? Mucho dinero, tiempo, muy pequeño, él.
Así que sí, 5 años después, sucedió lo mismo. O no, porque esta vez como pude, lo envolví en sus trapitos, como pude -casi no- lo cargué y lo puse en una cajita de zapatos. Tan tieso, tan frío, tan diferente.
Amarré la cajita y sin saber qué mas hacer, salí a ponerla arriba del contenedor de basura.
"no hay dignidad en la muerte. Puedes vivir con dignidad hasta el último segundo, pero una vez que mueres, ahí no hay dignidad".
Así se fue mi bebé. Sin dignidad, sin actos solemnes, con mil lagrimas y enseñándome mucho. En 6 días.
Trayendo a mi mente todos los recuerdos de hace 5 años.

Total, que ps no, -el mundo no ha cambiado con tu muerte, yo diría que sigue igual-

Pero igual, yo no quiero pasar por esto de nuevo, en mi burbuja Daysi seguía atras del sillón, en mi burbuja Máx seguirá dormido en su cama de paja.

Etiquetas: , ,

viernes

Perder la fe.

En realidad lo digo mal, no es la fe, esa es una palabra que me parece más grande que esto. Pero sí es la confianza, y en una de esas más fea, la esperanza. Pero mejor intento explicarme.
En la etapa pasada escribí un post estando yo enojadísima con la humanidad... pero lo borré.

Hoy vuelvo a escribir un post, con una temática que probablemente tenga el mismo hilo conductor, o termine en un punto similar.
Y es que me robarn mi celular el martes, los detalles ahora ya no vienen al caso (aunque jamás olvidaré a esa Renata, esa Tania y esa Rosario)
Ayer le robaron una laptop a mi hermano, misma que le habían dado tres días antes en su trabajo donde siempreyano lo querían contratar. (pero los detalles tampoco son el tema de este escrito.)

HAY MÁS!

Etiquetas: , ,

lunes

TOPS de TOPS

Hace un par de meses, leí pedacitos de Alta Fidelidad de Nick Hornby, porque Plaqueta me lo antojó. Total, que ni lo acabé ni nada, pero está chisocito eso de andar por la vida haciendo top 5 sssss ... o no?


Total que, comenzemos. Primero uno que ya tuitiié.


Negocios Frustrados:
1. Cafetería
2. Papelería
3. Tienda de Regalos
4. Autolavado
5. Estética UNISEX.


Profesores Favoritos de todos los tiempos:
1. Francisco Javier Tello. (biología, prepa)
2. César Villalba Hidalgo (DEPS, UNAM)
3. Diego César Oseguera Castillo.(4° Primaria)
4. Gabriela Castro Baz (3° Primaria)
5. Las misses del kinder (cuentan como una, porque eran hermanas)

Música que odio (de la más a la un-poco-menos odiada)
1. Duranguense
2. Norteña
3. Cumbia Villera
4. Cumbia a secas
5. Salsa.

Libros Favoritos. (ok aquí sí en desorden.)
. Momo (Michael Ende)
. El Psicoanalista (John Kaztenbach)
. La mitad oscura (Stephen King)
. Drácula (Bram Stroker)
. Viaje al Centro de la Tierra. (Julio Verne)
[el pilón]. Post Mortem

Películas que puedo ver cien veces (aunque no sean obras de arte)
. Hércules
. La Ventana Secreta
. Destino Final
. Piratas del Caribe
. Hitch

Profesiones Frustradas
1.Medicina
2.Ingeniería Geológica
3.Ingeniería en Audio
4. Biología
5.Letras Clásicas
[el pilón] .Historia

Idiomas Favoritos.
1. Alemán (no por malinchismo)
2. Español
3. Inglés BRITÁNICO
4. Sueco
5. Finlandés

por ahora dejaré estos. cuando se me ocurran más, actualizo.

Etiquetas: , ,

martes

La escuelita... secundaria

Iba a comenzar escribiendo que lo pensé mucho, pero la verdad es que ni tanto; más bien, sólo lo pensé bien dos veces. El caso es que les voy a contar de mis oscuros años de educación secundaria, que si bien no fue mi maximísimo, al final de cuentas fueron años importantes y eso sí, siempre lo he dicho.
El caso es que yo iba en mi muy bonita escuela primaria de Paga, me “codeaba” con niños nais e hijos de actores y uno que otro político, aunque yo era de clase media baja así que nunca fui realmente de ese círculo; esto viene a cuento porque, mi primaria, tenía secundaria, preparatoria y universidad  (mis hermanos sí se chutaron ese camino en la escuela) y pues, obviamente, yo quería estudiar la secundaria ahí, a como diera lugar, costara lo que costara. Mi papá no tenía trabajo, así que esto jamás sucedió y yo me ví en la PENOSA necesidad de buscar una escuela DE GOBIERNO.. the horror…
HAY MÁS!

Etiquetas: , ,