Socialité o "la primera vez que me creí grande"

Nunca fui una vagabunda, sólo en vacaciones me creía sacrílega por estar columpiándome afuera del departamento a las 11 de la noche ¡Escándalo!
Pero mis amigas lo eran un poquito más (y les daban un poquito más de permisos que a mí, también es verdad)...
un buen día, abrieron una librería de viejo muy muy cerca de mi casa, en la misma acera de la avenida, así que no se corría gran peligro de morir atropellado por un trailer, de esos que ni pasan por Av. Universidad, pero que mis papás creían que me asesinaría...en fin.
Todo esto, cuando yo tenía unos 11 años...y -de esto sí me acuerdo perfectamente- mis amigas me dijeron : "es que tu casi no sales, te vamos a sacar nosotros más seguido" y me llevaron hasta el FCE de MAQ a comprar un libro para la secundaria. ¡Escándalo! yo iba temblando.
De regreso, vimos que en la librería de viejo, en el fondo, había un café. Paréntesis: a mí no me dejaban cruzar la avenida, casi ni salir de la unidad, pero ya tenía celular. Fin del paréntesis. Por supuesto, mis amigas pensaron que sería perfecto tomar un café, como todas unas señoritas y best friends forever and ever. GOEI! (ah no, en esas épocas aún no decíamos GOEI, ni WE, ni GÜEY ni nada)
Total que entramos, mi mejor amiga pidió un café americano (yo sólo conocía el café de cafetera que tomaba mi papá en las mañanas) mi otra amiga un capuccino de vainilla... yo no era socialité, me quise morir y pedí un Té de manzanilla. (como el que tomaba cuando me dolía el estómago, que era casi siempre por tanto dulce y tanta gastritis)..me lo trajeron..
primer sorbo, me quemé.
segundo sorbo, me supo a rayos e hice cara de fuchi.
sobre de azúcar-sorbo-fuchi-sobre de azúcar-sorbo-fuchi-sobre de azúcar-sorbo-fuchi y así ad infinitum hasta que mis amigas se acabaron sus cafés, me vieron feo y yo dije, ok, vámonos.

y dejé mi té de manzanilla sobresaturado de azúcar y me fui con mis amigas y mi frustración.